Tu libertad termina donde comienza la mía: Capítulo 4 de When I Should've Kissed You

Vistas de página en total

sábado, 13 de octubre de 2012

Capítulo 4 de When I Should've Kissed You

¿Pero quién será? Miro la hora...¡Las nueve de la mañana!Lo cogeré, quien sabe, a lo mejor es importante.
-¿Diga?
-Buenos días, ¿María?, soy Liam.
Entonces no fue un sueño, lo conocí de verdad.¡Qué ganas de gritar!
-Te llamaba para ver si ya estáis listas para salir a conocer Londres.
-¡Pero si son las nueves de la mañana!
-Hay mucho que ver...
-Voy a despertarlas,¿nos dais por lo menos tres cuartos de hora?
-Venga . Yo os cronometro- Louis le ha quitado el móvil a Liam o ha estado en manos libres todo este rato.
-Nuestro hotel se llama The Small Big Bang. Estaremos en la entrada a las diez menos cuarto.
Cuelgo.
 ♪ ♫Or sell love to another man
It's too cold
For angels to fly
Angels to fly
To fly, fly
Or angels to die♪ ♫
¿Quién será?
-¿Diga?
-Me propongo para despertar a Almu.-esa voz... es Louis.
-Vales, espera un momento.
Las miro.Almu parece un angelito. Lydia está abrazada a Almu y hablando en sueños:
-Zayn, mmm, secuestrame.
Celia y Cris se están maltratando, ¿pero cómo pueden seguir dormidas? Seguro que tendrán moratones.
Me acerco a Almu, me pongo a su lado con el móvil entre las dos.
-Cuando quieras Louis.
-Aaaaaaalmuuuuuu, buenos días princesa.
Almu se despertó cuando dijo su nombre y ahora estaba haciendo un extraño grito que da miedo.
-¡¡¡LOUIS!!!-grita ella.
Las demás se despiertan sobresaltadas y através del teléfono se escucha las risas de Louis.
-Hasta luego Louis.-le digo.
-Adiós.
-¿Pero qué haces gritando, estas tonta o es que entrenas?- Celia, tan borde como todas las mañanas, no le sienta bien madrugar.
-E-e-e-raa Lou-u-uis...-se excusa Almu.
-Tenemos tres cuartos de hora hasta que los chicos vengan a por nosotras, así que daros prisa.
Sorprendentemente, después de empujones y gritos, terminamos cinco minutos antes, pero, cuando bajamos, los chicos ya están ahí tan perfectos como siempre.
-¡Habéis llegado antes!-exclama Louis.
-Sí, es que hoy estábamos motivadas.-cuenta Lydia- Además, hemos tenido un buen despertador.
Nosotras y Louis nos empezamos a reír. Al parecer los otros no saben nada de la llamada de Louis.
-¿Habéis desayunado ya?-pregunta Niall.
-No. Había prisa- dice Celia.
-Bueno pues aquí cerca hay una cafetería.
-Pues vamos.
Caminamos más de veinte minutos pero al final llegamos a la cafetería. ¿Qué consideran por cerca?
Entramos en el local. En una mesa hay tres obreros en su descanso. En otra mesa hay un grupo de jóvenes que están muy callados. En la barra hay un hombre corpulento, sudoroso, calvo y con un canosos bigote. Un poco más allá, donde debería estar la cocina, hay una mujer en la que se nota los años pasados y el trabajo bajo un gesto simpático.
Pedimos diez vasos de chocolate caliente y mogollón de dulces.
Cuando salimos de desayunar todos llevamos restos de chocolate en la cara gracias a Louis.
Como nuestro hotel se llama The Small Big Bang, los chicos nos llevan a ver el Big Bang en el típico autobús rojo londinense.
En el autobús nosotras cinco empezamos a cantar One Thing. Los chicos se ríen y empiezan a cantarla también. Algunas directioners que van andando por la calle empiezan a gritar y a buscarlos. Al verlos en la segunda planta del autobús salen corriendo detrás.
Miro a los chicos, ellos no están mirando a sus fans corriendo detrás de autobús, ellos están mirando a las fans que están junto a ellos en el autobús, nos están mirando a nosotras. Dirijo la mirada hacia Liam, el gira la cabeza y mira a otro lado.
¡Me estaba mirando! Me sonrojo.
Consigo un poquito de valor y me alejo sola, mirando mientras me alejo a Liam, hasta una esquina del autobús en la que no hay nadie. En mi sueño Liam se acercaría hablaríamos y nos fugaríamos. Pero Liam no viene solamente me dirige miradas furtivas. En una de esas miradas lo miro y sonrío, él sonríe, se sonroja y aparta la mirada. Ya no me dirige más miradas.
Al cabo de unos minutos Liam se acerca.
-¿Qué te pasa?-Me interroga.
-Nada, solamente estaba meditando.
-¿Sobre qué?
-No te lo puedo decir.
-¿Por qué?
-Es un secreto y me da vergüenza.
-Yo se guardar secretos y te prometo que no me reiré.
-¡Vaaale! Verás, antes cuando nos estabais mirando, he pensado que este siempre ha sido nuestro sueño conoceros y estar con vosotros y esto es como un sueño demasiado...fantástico, increíble.
-Ven vamos a un sitio.
*** 
Llegamos al Ojo de Londres y nos montamos una pareja en cada cabina.
-María, creo que te quiero, es algo extraño no se que siento. Cuando estoy contigo es como si me entendieras, como si me completaras. No se si me explico.
-Entiendo lo que dice porque...yo siento lo mismo.
Durante unos minutos el mundo se para y yo me sumerjo en esos ojos marrones en los que encuentro todo lo que quiero encontrar.

En cada cabina hay una bonita historia de amor distinta y, en cada cabina, las parejas ya tienen plan para mañana.



No hay comentarios:

Publicar un comentario